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A lo largo de la historia, el oro y los bienes raíces han sido las dos inversiones más confiables. Los propietarios siempre han sido la élite de la sociedad y poseer una propiedad inmobiliaria era un sueño para la mayoría de las personas. Incluso hoy en día, los precios han subido tanto que poseer una vivienda parece irreal. Sin embargo, en los últimos siglos, el sistema financiero ha desarrollado tanto que presenta una forma alternativa de hacer crecer la riqueza. Warren Buffett es una prueba viviente de eso, de que con inversiones inteligentes a largo plazo en el mercado de valores se puede hacer bastante bien.
En este video exploraremos cuál es una mejor inversión, si los bienes raíces siguen siendo una gran inversión como lo fue en el pasado o si el mercado de valores es una mejor alternativa en el siglo XXI. Hay mucho debate al respecto. Los inversionistas en bienes raíces afirman que los bienes raíces son la mejor inversión de todas, pero los inversionistas en el mercado de valores afirman lo contrario. Pero ambos tienen razón hasta cierto punto, la verdad está en algún punto intermedio. Pero para descubrir qué es exactamente, tenemos que analizar cada uno más a fondo.
Comencemos con el hecho de que los bienes raíces son caros, sin importar dónde te encuentres. La gente a menudo trabaja toda una vida solo para ser dueños de una propiedad. Ese fue probablemente el caso de tus padres. Para hacer una sola inversión inmobiliaria necesitas tener mucho ahorro. Por otro lado, puedes comenzar a invertir en el mercado de valores con tan solo $5. Por supuesto, depende de la acción, pero la mayoría de las empresas, incluso las grandes como Apple, cotizan alrededor de $300. Así que definitivamente puedes convertirte en inversor de una de las compañías más grandes del mundo con solo unos cuantos cientos de dólares. Pero el costo no se detiene allí. Ya no es como en los viejos tiempos, donde tenías que pagar a un corredor. Con aplicaciones como Robin Hood, puedes comprar acciones absolutamente gratis. Pero cuando se trata de bienes raíces, la tarifa de transacción es bastante cara.
Eso no significa necesariamente que el mercado de valores sea mejor. Los riesgos que vienen con el mercado de valores son mucho más altos. Es difícil analizar el mercado en su conjunto y las acciones individuales en particular. Podríamos estar en el punto máximo de una fase de expansión, donde todo el mercado está sobrevalorado y tu inversión probablemente caerá un 20%, 30% o incluso un 40% si no te deshaces de ella justo antes de que el mercado se desplome. Si algo nos ha enseñado la historia, es que nada es demasiado grande para fracasar. Por ejemplo, Apple es una gran compañía y Nokia también lo fue en su momento. De hecho, Apple estuvo al borde de la bancarrota en alguna ocasión. Los precios de las acciones cambian todos los días por diferentes razones que pueden provocar una respuesta emocional y llevarte a salir del mercado, lo cual sucede con bastante frecuencia incluso con inversores profesionales.
Pero con los bienes raíces no es así. Mientras estén en la ciudad, el terreno en el que se encuentran siempre será valioso. Incluso durante las crisis, a menudo recuperan su valor bastante rápido, ya que todos necesitamos un techo sobre nuestras cabezas. Los bienes raíces cubren una de nuestras necesidades más importantes. Cuando compras una propiedad, puedes dormir tranquilo y estar seguro de que no te despertarás al día siguiente con la noticia de que tu propiedad ha perdido la mitad de su valor.
Lo que también hace atractivos a los bienes raíces es que generan ingresos pasivos. Con los precios de los alquileres en aumento, ni siquiera necesitas trabajar. Es una de las pocas inversiones que puede proporcionarte ingresos estables y sólidos con una rentabilidad por dividendo del 7%, 8% e incluso del 10%. Es extremadamente raro que cualquier empresa pague un dividendo con una rentabilidad del 5% o más. Algunas empresas pagan, por supuesto, pero son acciones riesgosas en las que podrías perder mucho más por la caída del precio de lo que puedes ganar por los dividendos. Pero también funciona de la otra manera. Los bienes raíces no aprecian tanto como el mercado de valores. En 2019, en promedio, los precios de las viviendas aumentaron un 3.8%, mientras que el S&P 500 subió un 28%, casi 10 veces más. En la última década, Amazon tuvo un rendimiento total de 1200%, mientras que Netflix tuvo tres veces ese número, un 3700%. Nunca encontrarás tales rendimientos en el mundo de los bienes raíces, porque en el mercado de valores, las empresas constantemente innovan para mantenerse por delante de los demás. En 25 años, Amazon pasó de no ser nada a ser una empresa de más de un billón de dólares. Sin embargo, el mundo de los negocios no tiene valor hoy, estás en la cima y mañana tu competidor te derribará. No es como el mundo de los bienes raíces, que se encuentra en la esquina y sigue ofreciéndote ingresos mensuales pasivos.
En cuanto a los impuestos, hay dos enfoques. El precio de las acciones puede aumentar un mil por ciento, pero solo estarás enriqueciéndote en papel. Si deseas materializar esa riqueza, debes vender esas acciones y tendrás que pagar un impuesto sobre las ganancias de capital, que es del 20% para inversiones a largo plazo y puede llegar al 37% para operaciones a corto plazo. Con los bienes raíces, hay varias formas de evitar impuestos y utilizar ese dinero para hacer crecer tu riqueza. Por ejemplo, en lugar de pagar la propiedad completa de una vez, puedes deducir una parte de tu hipoteca atribuida a los pagos de intereses en tu declaración de impuestos. Puedes recuperar el costo de una propiedad de alquiler generadora de ingresos a través de la depreciación. Los gastos de depreciación suelen resultar en una pérdida neta en la propiedad de inversión, incluso si esta produce flujo de efectivo positivo. Esta pérdida, así como los gastos como servicios públicos y seguros, se deducen del ingreso ordinario. Incluso si terminas vendiendo la casa, puedes evitar pagar impuestos sobre las ganancias de capital si compras otra propiedad. Los beneficios fiscales son bastante decentes en los bienes raíces. Pero, por supuesto, no todo es color de rosa. A diferencia de las acciones, donde puedes leer los estados financieros de la empresa, investigar sobre ella y decidir si vale la pena invertir tu dinero o no, los bienes raíces requieren mucho más trabajo. Encontrar una buena propiedad de alquiler puede llevar semanas, si no meses. Eso es solo una parte. Una vez que comienzas a alquilarla, te enfrentarás a diferentes tipos de desafíos, como encontrar inquilinos adecuados que puedan seguir pagando el alquiler y cuidar de la casa. La casa siempre necesita algún tipo de mantenimiento, siempre se rompe algo y debe ser reemplazado. Todo eso genera costos y gastos adicionales. También puede dificultarte mudarte a otra ciudad o país, ya que tu propiedad puede necesitarte allí todo el tiempo. Sin embargo, invertir en el mercado de valores no tiene todas esas complicaciones. Puedes estar donde quieras, simplemente seguir las noticias y el rendimiento de tu cartera desde la comodidad de tu smartphone.
Lo que me gusta del mercado de valores es que te puede enseñar más sobre el mundo de los negocios de lo que lo haría tu título universitario de cuatro años. Cada vez que analizas una empresa antes de invertir tu dinero en ella, debes leer sus estados financieros, comprender su flujo de efectivo, estudiar su trayectoria para tener una mejor claridad sobre sus decisiones futuras y conocer mejor sus productos y ventas. Además, tienes que comprender en profundidad cómo funciona la maquinaria económica, el papel de los bancos en el ciclo económico, y así sucesivamente. Si alguna vez quieres comenzar un negocio, ese conocimiento será el pilar de tu startup.
Pero el mercado de valores no se trata solo de comprar y vender acciones. El sistema financiero es tan complejo que hay muchas más formas de ganar dinero en el mercado de valores de las que la mayoría de las personas conocen, como las operaciones a corto plazo. Puedes ganar dinero pronosticando el precio futuro del petróleo crudo. No podemos discutir todo eso en este video, pero te haces una idea. Si dominas el mercado de valores, se te abrirán las puertas de las oportunidades, incluso si no tienes tiempo para hacer todo eso, puedes mantener tus ahorros en un fondo de índice y estar seguro de que a largo plazo puedes esperar un rendimiento del 10%.
Cuando compras una acción, es simplemente un documento digital en la pantalla de tu smartphone. Casi no tienes control sobre ella, ya que tu acción individual no tendrá una gran influencia en la empresa cuando esta tiene otros cinco mil millones de acciones. ¿Por qué arriesgar? Los bienes raíces te brindan un control completo sobre tu inversión. Puedes tocarla, sentir y controlarla. Además del ingreso pasivo que puede proporcionar, como discutimos anteriormente, puedes utilizar el apalancamiento. Digamos que tienes veinticinco mil dólares. Invertir esos veinticinco mil dólares en valores te dará un valor de veinticinco mil dólares. Por otro lado, la misma inversión en bienes raíces podría comprar una propiedad de ciento veinticinco mil dólares con una hipoteca y todo el interés estaría sujeto a impuestos, lo cual es una ventaja.
Entonces, ¿dónde deberías invertir? La respuesta es: depende. Si estás interesado en ingresos pasivos, entonces los bienes raíces son tu elección. Sin embargo, si buscas mayores rendimientos, el mercado de valores es sin duda una mejor opción, especialmente si eres un inversionista novato con poco dinero para comenzar. Pero también debes tener en cuenta lo que encuentras interesante. Si encuentras aburrido analizar empresas y pasar horas revisando papeleo interminable, puede que simplemente no sea para ti. Además, los factores locales también juegan un papel importante. Tal vez en tu ciudad, o incluso en tu país, las cosas sean diferentes. Por lo tanto, debes sacar tus propias conclusiones basadas en tus circunstancias.
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